sábado, 31 de diciembre de 2011

Santa María madre de Dios

La Solemnidad de Santa María Madre de Dios es la primer Fiesta Mariana que apareció en la Iglesia Occidental.

La antigüedad de la celebración mariana se constata en las pinturas con el nombre de "María, Madre de Dios" (Theotókos) que han sido encontradas, en las Catacumbas o antiquísimos subterráneos que están cavados debajo de la ciudad de Roma, donde se reunían los primeros cristianos para celebrar la Misa en tiempos de las persecuciones.

Su celebración se comenzó a dar en Roma hacia el siglo VI, junto con la dedicación -el 1º de enero- del templo "Santa María Antigua” en el Foro Romano, una de las primeras iglesias marianas de Roma.

Esta fecha del 1 de Enero tiene una importancia especial en el Calendario Romano, ya que a partir del siglo II a. C. y desde el año 46 d. C. fue considerada el inicio del año.

Y Pablo VI proclamó también el 1 de Enero, la jornada de la Paz.

En el año de 431, el hereje Nestorio se atrevió a decir que María no era Madre de Dios, afirmando: "¿Entonces Dios tiene madre?  Pues entonces no condenemos la mitología griega, que les atribuye una madre a los dioses".

Ante ello, se reunieron los 200 obispos del mundo en Éfeso -la ciudad donde la Santísima Virgen pasó sus últimos años-, y basándose en la afirmación del símbolo de los Apóstoles:

"Jesucristo fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo y nació de Santa María Virgen" Theotókos, es decir, la Madre de Cristo que es Dios y hombre verdadero".

Por tanto, en María, fue engendrado el cuerpo Santo de Jesús al cual se le unió hipostáticamente el Verbo, la segunda persona de la Santísima Trinidad.

E iluminados por el Espíritu Santo declararon:
"La Virgen María, sí es Madre de Dios porque su Hijo, Cristo, es Dios".

Y acompañados por todo el gentío de la ciudad que los rodeaba portando antorchas encendidas, hicieron una gran procesión cantando:
"Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros pecadores ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén".

Asimismo, San Cirilo de Alejandría resaltó: "Se dirá: ¿La Virgen es madre de la divinidad? A eso respondemos:

El Verbo viviente, subsistente, fue engendrado por la misma substancia de Dios Padre, que existe desde toda la eternidad...

Pero en el tiempo él se hizo carne, por eso se puede decir que nació de mujer".

La Iglesia coloca esta fiesta en tiempo de Navidad para celebrar la parte que tiene María en el misterio de salvación y exaltar su maternal divinidad por quien recibimos al autor de la Vida y de nuestra salvación.

Así mismo, hoy renovamos la adoración al príncipe de la Paz, e imploramos por medio de María, este don supremo tan necesario para el mundo.

María Santísima, verdadera Madre de Dios, estamos seguros que en este nuevo año intercederás por nosotros y nos alcanzarás de tu Hijo la Paz y el Amor para nuestros corazones, nuestros hogares y nuestros pueblos. Amén.

La información ha sido obtenida de:
http://siembraconmigo.blogspot.com/

martes, 27 de diciembre de 2011

Bendición del árbol de Navidad

Además del belén y de la imagen del Niño Jesús, hay otro signo que se ha convertido en característico de la Navidad, es el árbol.

De origen nórdico (Alemania, siglo XVI), tuvo desde el principio un sentido claramente cristiano. El árbol nos recuerda, por una parte, el árbol del Paraíso, según el libro del Génesis y por otra, el árbol que según el Apocalípsis estará plantado, como símbolo de vida y fecundidad, en el cielo. Entre uno y otro encontramos el árbol de la Cruz, en el que Jesús nos ha salvado.

Por tanto el árbol es signo de vida y frutos, pero también de luz, luz representada por las velas que algunas veces se ponen en su interior, o las luces de colores que cuelgan de él. Cristo es la luz, y la estrella que guío a los Magos de Oriente hasta donde estaba el recién nacido, es la estrella que ponemos en la copa del árbol, indicándonos el camino que nos lleva a celebrar su nacimiento.

Oración de bendición

Dios, Padre nuestro, fuente de la vida.
Tú has creado todo lo que existe,
la naturaleza, todos los seres vivos.

Hoy, en la alegría de las fiestas de la Navidad, Inauguramos este árbol,
que es como un signo de la fuerza y la fecundidad
que tú has puesto en nuestro mundo.
Este árbol nos invita a mirar hacia arriba, hacia ti,
y al mismo tiempo nos recuerda
que tú, al enviarnos a tu Hijo Jesús,
has querido estar cerca de nosotros
y has arraigado en nuestra tierra.

Estos días de Navidad
celebramos que tu Hijo ha venido a nacer
aquí, en nuestro mundo,
para llenarnos de luz, de gracia, de esperanza.

Dios, Padre nuestro,
que la luz y la gracia de Jesús, tu Hijo,
nos ilumine siempre. Amén.

domingo, 25 de diciembre de 2011

Bendición imagen del Niño Jesús

En un espacio adecuado de la casa se puede colocar también una imagen del Niño Jesús, del tamaño que parezca oportuno.

Es una imagen que nos ayuda a visualizar el misterio de la Encarnación de Dios en nuestra historia. No sólo a los niños, sino también a los mayores, nos invita a dar profundidad cristiana a este período de fiestas de la Navidad.

Bendición del papa Juan Pablo II (Notitiae 1979, p.72)

Dios, nuestro padre,
tú amaste tanto a los hombres
que nos enviaste a tu único Hijo Jesús,
nacido de la Virgen María,
para salvarnos y conducirnos a ti.

Te pedimos que, con tu bendición,
esta imagen de Jesús,
que está a punto de venir de nuevo a nosotros,
sea, en nuestra casa,
signo de tu presencia y de tu amor.

Padre bueno, danos también a nosotros tu bendición,
y a todos nuestros familiares y amigos.
Abre nuestro corazón
para que podamos recibir a Jesús con gozo,
y hacer siempre lo que él nos pide
y verlo en todos los que tienen necesidad de nuestro amor.

Te lo pedimos en el nombre de Jesús,
tu  Hijo amado,
que viene para dar la paz al mundo.

El que vive y reina por los siglos de los siglos.

Amén.

viernes, 23 de diciembre de 2011

Bendición del belén

El pesebre, llamado también “belén” o “nacimiento”, es uno de los símbolos más clásicos de la Navidad. Se dice que fue San Francisco de Asís el que, a principios del siglo XIII, propagó esta iniciativa para ayudar a entender el misterio entrañable del nacimiento del Hijo de Dios.

El belén presenta las figuras que según los evangelios rodearon el acontecimiento: María y José, los ángeles, los pastores, los magos. Es un elemento pedagógico, para recordarnos cómo Dios se ha hecho uno de nuestra familia de una manera sencilla y profunda.

Bendición propuesta por el papa Pablo VI (Notitiae 1970, p.35)

Oh Dios, padre Santo,
que has amado tanto a los hombres
que les has enviado a tu Hijo Unigénito,
nacido de ti antes de todos los siglos.

Dígnate bendecir este belén
que será la alegría de esta familia cristiana.
Que estas imágenes del misterio de la encarnación
sostengan la fe de los padres y los adultos,
reaviven la esperanza de los niños
y aumenten en todos el amor.

Te lo pedimos por Jesús, tu Hijo amadísimo,
que nos ha salvado con su muerte y su resurrección
y que incesantemente ruega por nosotros delante de ti.

viernes, 16 de diciembre de 2011

Vivamos el Adviento con María

El Adviento de María fue muy largo:
Duró 9 meses…, de espera y de preparación.

Lc 1,30

Todo empezó con el “ángel”, el mensajero de la  “Buena Noticia”.

A partir de ese día,  María comenzó una nueva etapa que cambió su vida y su futuro.
Aquel día…

… María comenzó su. ADVIENTO

Pero… ¿Cómo fue el Adviento de María?

UN ADVIENTO DE ORACIÓN
María rezaba. Por eso pudo escuchar la voz del ángel.

Siempre estuvo atenta a la voz de Dios.

Mt 1,20

UN ADVIENTO DIFÍCIL
- “¿Qué pensará José?”
- “¿Qué será de este Niño?”

Lc 2,5-6

No le faltarán problemas y preguntas difíciles.

Lc 1,37

SE FIABA DE DIOS
A pesar de las dificultades y problemas que tuviera…
María sabía que  Dios estaba con Ella y que no le fallaría.

Lc 1,40. 46

UN ADVIENTO  SERVICIAL   y ALEGRE
Acude en ayuda de su prima y llena su casa de alegría.

María aprende a cambiar al niño, a limpiar lo que ensució el niño, a darle el besito donde le duele al niño…, María servicial que daba su tiempo y su amor.

Lc 1,45-55

DABA GRACIAS
Y lo hacía con cantos de alabanza como el “Magníficat”.

“Mi alma alaba al Señor, porque es salvador, porque  se ha fijado en mí … y porque siempre se acuerda  de su pueblo”
(Magníficat)

ESPERA ILUSIONADA
… esperando que  llegara el  gran momento de dar a luz…
… Esperando el día de. ¡NAVIDAD!

Hay muchas maneras de esperar la Navidad, con ilusiones muy distintas.

María es maestra y modelo de ilusión

¿Y mi Adviento?

¿En qué se parece al de María?

-       ¿Es adviento de oración?
-       ¿Se dar la cara a los problemas y superarlos?
-       ¿Me fío y me apoyo en Dios?
-       ¿Servicial y alegre?
-       ¿Doy gracias a Dios?
-       ¿Espero con ilusión?
-       Espero con ilusión…. ¿a Jesús?
-       ¿O…. espero otras cosas?

Navidad: tiempo de esperar con  y como María.

viernes, 9 de diciembre de 2011

Oración de dos novios

Somos novios, Señor, y nos queremos mucho.

Un buen día nos encontramos y nos conocimos, como si siempre nos hubiéramos buscado.

¡Qué experiencia maravillosa, para cada uno, sentirse elegido, preferido, sin saber muy bien por qué!

Sentimos tu presencia, Señor, y te damos las gracias por haber hecho posible este amor.

Queremos tenerte siempre presente entre nosotros:
-       Para que seamos abiertos y sinceros;
-       Para que busquemos el bien y la alegría del otro;
-       Para que nos esforcemos en cambiar y ofrecernos cada uno lo mejor de sí mismo;
-       Para que el deseo y la pasión no ahoguen nuestro amor sincero;
-       Para que juntos forjemos un ideal- vocación para toda la vida y nos unamos un día para alcanzarlo.

Deseamos, Señor, que llegue el día en que sellemos para siempre nuestro amor con el sacramento del matrimonio.

Haz que nuestro noviazgo sea un camino de maduración y que seamos conscientes del compromiso mutuo que asumiremos en tu presencia.

Amén.

viernes, 2 de diciembre de 2011

Carta de Adviento

Querida/o:

¿Cómo estás? ¿Qué tal esta semana? ¿Cómo la has vivido? ¿Qué ha pasado por tu corazón?

Quisiera que este momento sea importante y “mágico” para ti.

Quisiera hoy, de una forma especial, que lo que digas lo VIVAS y que lo que VIVAS lo digas.

De puntillas y en silencio me apetece entrar en tu corazón. Digo de puntillas y silencio porque el corazón es sagrado, es el mejor tesoro de la persona, es la mayor fuente de felicidad y, por qué no, a veces también de tristeza.

El corazón es el centro del ser humano porque en él hay muchos nombres de personas, las que te han ido dejando huella. Y por eso un corazón es la suma de muchos corazones que se albergan en él.

Estamos en ADVIENTO.: Tiempo de preparar el corazón, para que nuestro latido tenga un mismo ritmo: el del AMOR.

Por eso me gustaría que en tu corazón haya un rinconcito reservado para mí porque me gustan tus cosas, me interesan tus asuntos…en definitiva me importas tú. Cuando tu corazón se alegra, yo me alegro contigo. Cuando está triste, me entristezco también. Cuando hay dolor… también sufro. Cuando haces feliz a alguien… me alegro, y cuando esto ocurre y te atreves a mirar al cielo, empieza a brillar una nueva ESTRELLA. Cuando disfrutas, disfruto…Cuando le haces daño a alguien aún sin querer, me entristezco y ¿sabes por qué? Porque amo al SER HUMANO.

Quisiera que hoy me prepararas un rincón de tu corazón. No te preocupes porque los dos sabemos qué es lo que te preocupa, lo que te inquieta…Sé de tu corazón y ¿sabes? me gusta. Me gusta así como es…me gustas así como eres.

Cuando mis padres buscaban posada para mi nacimiento, no lo encontraron. Iban llamando de puerta a puerta, de corazón a corazón y nada.

No sé si ahora en el siglo XXI encontrarían posada o se repetiría lo mismo. Pero tengo la corazonada que tu corazón, vuestro corazón, está abierto para acogerme con cariño.

Ahora me gustaría que te pusieras “manos a la obra” y pusieras a punto tu corazón.

Cuando ya esté preparado, pon en él todos los detalles “preciosos”, lo que quieras y que tu sabes que me gusta…Sería divertido que pudieras viajar hasta el lugar donde nací e imaginarte que eres un personaje de Belén (un pastor, un comerciante, un niño...) y comenzar a CAMINAR.

Toma tu equipaje (no mucho, que te cansas) y en cuatro semanas, montándote en la máquina del tiempo, llegarás al portal de Belén donde yo estaré. Hay que prepararse. ¡Animo y adelante! Cada semana será una parada. En esa parada me encantaría que metieras en tu mochila un regalo para mí. Te diré un secreto: los regalos que más me gustan son los de tu corazón.

Así tu corazón estará preparado con lo mejor que tengas.

GRACIAS. Este año tendré la mejor posada, tendré los mejores corazones donde poder nacer.

Me acurrucaré en tu rinconcito y te ayudaré…

Un fuerte abrazo:
Jesús.